7 Consejos para evitar la procrastinación

En este artículo veremos cómo superar la procrastinación, cuáles son los pasos a seguir y los consejos para no posponer las cosas.

Procrastinación, un gran enemigo. Nos impide tomar medidas y finalizar nuestros proyectos. Nos impide alcanzar lo que queremos. La procrastinación va más allá: nos hace perder confianza en nosotros mismos, pero este artículo nos ayudará a identificar sus causas y dará consejos para evitarla.

1. Hacer una lista de tareas


Debemos usar listas de tareas; una lista donde anotemos todas las acciones que necesitamos realizar; éstas deben ser lo más detalladas posible. No debemos describirla vagamente, debemos ser precisos porque cuando tenemos una tarea general, es más fácil dividirla en tareas específicas. ¿Por qué? Con una tarea específica, no tenemos que pensar qué deberíamos hacer, podemos atacar directamente; avanzamos un paso y podemos comenzar de inmediato.

2. Simplemente comenzar

La parte difícil es siempre comenzar, pues esto requiere la mayor cantidad de energía. Pero, una vez que hemos dado el paso y comenzado por fin, avanzamos, y ya no nos daremos cuenta.

Cuando nos obligamos a salir a correr, por ejemplo, es lo mismo. Quizás lo más difícil sea, desde un punto de vista psicológico, ponerse la ropa deportiva y salir a dar los primeros pasos. Una vez fuera de casa, nuestra mente se puede enfocar en objetivos e incluso planear los pasos para superar nuestros propios récords, aun cuando originalmente no queríamos salir de la cama.

3. Dividir las grandes tareas


Quien mueve la montaña es porque comienza quitando piedras pequeñas. Cuanto menor sea la tarea, más fácil será lograrlo. Y, sobre todo, será más fácil investigarlo si es algo que dominamos y parece fácil. Pero, cuando queremos salir de nuestra zona de confort, cuando queremos lograr grandes cosas, llega un momento en que pareciera que perdemos el control , y que el alcance del proyecto nos supera.

El problema, si nos sentimos abrumados es que empezamos a darnos por vencidos porque la tarea parece ser muy difícil; no nos sentimos preparados para el desafío. La motivación cae y dejamos todo. Esto es un círculo vicioso que nos hace volver a nuestra pequeña zona de confort ...por eso es importante dividir las tareas.

También es verdad que para contemplar un verdadero avance, necesitamos herramientas para concentrar nuestro objetivos; el valor de una ayuda externa es invaluable; por ejemplo, cuando queremos aprender un idioma, lo mejor es apoyarnos con algún docente, como con clases particulares de inglés, aunque sea para un inicio y sentar las bases de los pasos que debemos seguir.

4. Recompensar cada paso


Para superar la procrastinación, hay un método para recompensarnos tan pronto como alcancemos una meta. Tenemos un proyecto, un objetivo que lograr, pero es tan grande que llevará tiempo; por lo tanto, para mantenernos motivados a largo plazo es necesario dividir este proyecto en varias etapas con "puntos de control" por alcanzar.

De lo contrario, es demasiado largo, y es probable que nos desanimamos antes. Si el objetivo lleva un año, pasará mucho tiempo antes de alcanzar nuestra recompensa, así que es mejor que trabajemos por niveles. Estos pueden ser recompensados. Cuando llegamos a un aterrizaje tenemos derecho a un pequeño premio. Incluso en nuestro trabajo diario, tan pronto como hayamos completado una serie de tareas, podemos recompensarnos con un episodio de alguna serie o algunas páginas de una buena novela, incluso un buen vaso de jugo de frutas.

5. Cuidarnos


Nuestra dieta es el pasaporte a la buena salud. Si deseamos realizar nuestras tareas, necesitamos tener energía, y para tener energía, tenemos que darle a nuestro cuerpo lo que necesita. Tomar café y galletas nos dará un impulso en este momento, pero nos debilitará en cuestión de pocas horas, una vez que los picos del azúcar y de la cafeína hayan desaparecido.

6. Programar un tiempo para cada tarea


Un cronómetro o un despertador nos pueden ayudar en la organización de tareas. Podemos combinar algunas reglas; darnos un tiempo para una tarea determinada tiene un doble efecto:

  • Nos permite comenzar más fácilmente (si decimos "me doy 25 minutos para hacer eso", es más fácil que imaginar trabajar durante horas).

  • Nos permite ser más eficientes: ¡comenzamos una verdadera lucha contra el reloj! Se convierte en un juego que nos atrapa rápidamente.

En un mundo donde necesitamos e incluso demandamos productividad, no debemos posponer las cosas para llegar al final. El éxito es posible para todos, pero tenemos que ir a buscarlo. ¡Es posible vencer la procrastinación!

Y, por último, no debemos esperar hasta mañana para implementar estos consejos. Entonces, ¿qué estás esperando para dejar de procrastinar?

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